Gemas apocalípticas y el simbolismo de la Esmeralda

Las esmeraldas más antiguas tienen unos 3.000 millones de años y, según los registros disponibles, ya se conocían y vendían en los mercados babilónicos en el año 4000 a.

Es una piedra preciosa transcultural a la que se hace referencia en el Libro del Apocalipsis como una de las piedras angulares de la Ciudad Celestial.

Las doce gemas apocalípticas están íntimamente relacionadas con los doce apóstoles. Esta relación, confirmada por los escritos de Andreas, obispo de Cesarea (563-637 dC), quien escribió sobre esta piedra preciosa:“… La verde Esmeralda se alimenta con aceite para que su transparencia y belleza no cambien. Esta piedra diseñada para representar a Juan el evangelista. Calmó con óleo santo a las almas afligidas por el pecado, y por la gracia de su excelente doctrina dio fuerza constante a nuestra fe”…

San Juan Evangelista, el Apóstol Juan, fue uno de los doce discípulos de Jesús. Fue conocido como el Evangelista porque escribió el Cuarto Evangelio y el Libro del Apocalipsis. Según los teólogos católicos, la Esmeralda era la representación física de la lealtad, la esperanza, la verdad, la autenticidad y la autenticidad.